Nada dura...

Esta tristeza es diferente. Simplemente está. No es una depresión inmensa pero sí duele bastante. Y es más porque es de esas veces que no hay razón o hay algunas pero no suficientes para sentirte...así. Y lo que es peor es sentir una felicidad extrema, que parece que no podrás soportar (y no lo haces) porque cuando pasa, no aguantas el vacio. Pues he aquí cuando todos esos pensamientos llegan a mí, desde que era pequeña deseaba que no hubiera personas que me quisieran y viceversa para que no me lastimaran. Es algo que siempre pienso cuando estoy mal. Ayer fué mi festival de ballet y fue como un sueño. Estar bailando con el corazón enfrente de todos, pero la gente me decepciona. Y yo también. No sé ni como explicarlo pero desde que desperté no quería abrir los ojos. Desde el martes pasado no había usado a mia. Hoy la usé dos veces y estoy harta. Harta de la comida, de que me digan de mis hábitos alimenticios, que cada cosa me recuerde lo asquerosa que estoy, que las personas me decepcionen, que me mientan y que sean hipócritas. Estoy realmente triste, pero olvidaré mis sentimientos y arreglaré las cosas por separado, porque no me puedo comer al mundo. Al menos sé que ana no me dejará y mia estará ahí igual. Cuando me sienta mejor subiré fotos de mi festival y posiblemente un poema que escribí.